20 de septiembre de 2006
De la mano del panameño José Luis Gárces, el actual campeón de Uruguay, el Nacional de Montevideo, se clasificó para los octavos de final de la Copa Nissan Sudamericana de fútbol tras vencer por 2-1 al Libertad, de Paraguay, en un partido muy luchado y con momentos de buen juego.
A los 36 minutos, un balón bien colocado al área rival permitió al panameño José Luis Garcés marcar la apertura.
El Nacional se enfrentará con el vigente campeón, el argentino Boca Juniors, el próximo 28 de septiembre, en un partido que promete mucho entre dos equipos importantes del balompié rioplatense.
El Nacional no especuló con la ventaja que tenía por haber ganado al Libertad también (1-2) a domicilio en Asunción y, sin arriesgar mucho, el entrenador Martín Lasarte alineó a un equipo que sirviese para la tarea de armar el ataque, pero mantener seguro su terreno defensivo.
El Libertad tuvo más el balón en los dos tiempos, buscando llegar con posibilidades a la meta del Nacional, pero una defensa muy bien ajustada del local, con tres zagueros movedizos -Jaume, Godín y Pallas- controló con claridad las acciones del visitante.
Sin apremios, el Nacional movilizó sus líneas con criterio y sin dejar espacios para el rival.
Con buenos pases largos de Tejera y la velocidad de Garcés y Gonzalo Castro, el Nacional llegaba menos pero con más profundidad.
El equipo de Montevideo, con la tranquilidad de estar por delante en la cuenta, aseguró mejor el traslado del balón, en tanto el Libertad comenzaba a mostrar fallas, fundamentalmente en la contención en el medio campo.
El equipo paraguayo entró decididamente a jugar al "todo o nada", complicó el juego del Nacional y peleó el partido en toda la cancha.
Con un buen desempeño de Cristian Riveros y Pablo Guiñazú, buscando siempre el balón y con un mejor control, el Libertad comenzó a encerrar al Nacional en su defensa.
El entrenador Lasarte notó que su equipo estaba siendo superado y recurrió al banco de suplentes: hizo entrar a Daniel Leites, con más marca que Tejera, Jorge Martínez y el delantero Diego Alonso, un jugador muy veloz para acompañar a Castro en el contragolpe.
Pero, a los 65 minutos, Carlos Bonet, marcó de cabeza la igualada 1-1, tras una serie de desaciertos en su área de la extrema defensa del Nacional.
El ingreso de Carlos Gamarra en el Libertad complicó más el panorama para el Nacional, que sólo tenía como arma ofensiva las carreras de Castro y Diego Alonso.
De ese modo, a los 86 minutos, Gonzalo Castro, el mejor delantero del fútbol uruguayo en la actualidad, puso el 2-1, quien tras un tiro de media vuelta desde la línea de demarcación del área mandó el balón a la red sobre la cabeza del portero del equipo asunceño y resolvió la clasificación.
José De Aragón
