Martes 27 de de octubre.
Por: Alexander Bermúdez
Los famosos Harlem Globetrotters volvieron a llenar el gimnasio Roberto Durán (antes Nuevo Panamá), en una entretenida velada de espectáculo deportivo, en el que no faltaron las hilarantes rutinas de humor, frente a sus eternos rivales los Generales de Washington, quienes tuvieron otro turno para perder.
Luego de más de 20 años de no visitar Panamá, el famoso equipo de baloncesto se presentó ante un casi lleno completo en la arena recién inaugurada, liderados por el panameño Kevin “Special K” Daley, quien en el pasado representó a Panamá en el mundial de Japón de 2006 y había sido parte en otras ocasiones del seleccionado panameño.
Mediante rápidos rompimientos, que por lo general terminaban en acrobáticas clavadas, el famoso quinteto marcó el camino durante todo el encuentro a sus eternos rivales, quienes eran presa frecuente de las mofas y rutinas humorísticas de los Trotamundos, que siempre fueron del deleite de grandes y chicos, quienes aplaudían a rabiar cada una de las acciones del partido.
En lo particular, nos hizo gracia ver varias caras latinas como las del boricua El Gato Meléndez y Blenda Rodríguez, en un equipo tradicionalmente de jugadores de color, lo que es una muestra más de la globalización que experimenta el baloncesto como juego universal, casi caminando a la par del balompié, como uno de los deportes más seguidos por un mayor número de fanáticos.
Contrario a lo que muchos piensan, los Globetrotters no son originarios de Harlem New York, sino que fueron fundados en 1929 en la ciudad de Chicago, Illinois. El equipo adoptó el nombre solo por su connotación, por el elevado número de personas de raza negra que viven en este suburbio de Manhattan.
También, aunque muchos pudieran ver esto como imposible, los Trotamundos han perdido en tres ocasiones ante sus rivales de siempre, los Generales de Washington o los Nacionales de Nueva York, siendo su primera derrota ocurrida en un partido en 1962.
Muchos de quienes contamos con más de tres décadas de edad, recordamos con cariño la serie de TV de los Globetrotters en dibujos animados, que por algún tiempo se transmitió en una cadena local a finales de los años 70 y a principios de los 80, en los que Curly Neal y Meadowlark Lammon, eran los principales frontmen del equipo. Los números de estos jugadores fueron retirados del equipo recientemente.
Otro dato curioso es que Wilt Chamberlain (Q.E.P.D.), el legendario canastero de la NBA que tiene el récord de más puntos anotados en un partido, con 100 tantos, fue parte del equipo de los Globetrotters antes de ser jugador de la NBA, durante una temporada y jugaba en la posición de base, pues el centro en la alineación era Lammon, siendo quizás el jugador más alto en la historia del baloncesto moderno en jugar esa posición. El número 13 que inmortalizó el legendario jugador fue retirado al año siguiente de su muerte, en el año 2000.
Incidente de Special K con ministra Lucinda Molinar
Por: ABC
Es de todos conocidos que, además de su gran habilidad en el manejo del balón, sus sorprendentes pases y acrobáticas movidas, los Harlem Globetrotters se distinguen por realizar rutinas de humor a lo largo de todo el partido y en algunas de ellas interactúan con el público.
Una de estas rutinas es la de la persecución de uno de los jugadores con el balde de agua, ya sea al árbitro o, en este caso, a otro jugador del equipo. Nada fuera del libreto para ellos: el Special K perseguía a un compañero de equipo con un balde de agua para hacerlo salir del trance hipnótico en el que lo había sumido el entrenador de los Generales de Washington. Corrieron ambos en persecución a través de toda la cancha; Special K con el cubo de agua, amagando con arrojar su contenido al público en varias ocasiones, hasta que finalmente el compañero del equipo se paró al borde de la cancha y Special K lanzó el cubetazo, cayendo todo el baño acuático en el rostro y figura de la actual ministra de Educación, Lucinda Molinar, quien atendía el partido en primera fila, en compañía de sus hijos.
Una enorme sorpresa se vio reflejada en el rostro de la ministra, quien con los ojos muy abiertos no podía dar crédito a lo sucedido. El resto del público reventó en sonora carcajada, lo que quizás detuvo a la ministra, quien intentó expresar su enojo de manera más elocuente ante el “culeco” adelantado. Luego lo asumió mejor, como parte de un show y sacó su pañuelo para secarse, mientras todas las miradas atendían a cada uno de sus movimientos, para ver su reacción.
¿Cómo interpretar este incidente, cuando quien lo propició es panameño y es muy poco probable que no conozca a Lucinda Molinar, quien por años ha estado en la palestra pública? La interpretación solo la sabrá Kevin Daley (Special K). Gracia a Dios, Lucy pudo decir: el Show debe seguir.
Fotos: "el birrioso".