Panamá tardó 20 años para llegar a un Mundial de Baloncesto y regresó del mismo en tan sólo una semana. El quinteto de Nueva Zelanda derrotó 86-75 a Panamá y se cruzará con Argentina en Saitama por los octavos de final del mundial de básquetbol, mientras que los panameños regresan a la triste realidad, tras una pesadilla llamada Mundial de Japón.
Craig Bradshaw aportó 17 puntos y Kirk Penney 16 para esta victoria de Nueva Zelanda, que de esta manera se clasificó cuarto en el Grupo B que ganó España seguido de Alemania y Angola.
Panamá y Japón resultaron eliminados.
En Panamá, que cosechó su quinta derrota al hilo, se destacaron Michael Hicks, quien jugó en el equipo Texas A&M en la temporada 1999-2001, con 20 anotaciones, y Ruben Douglas con 15.
El primer tiempo finalizó 48-38 en favor de Nueva Zelanda, que al salir cuarto se deberá cruzar con el primero del Grupo A, que ganó Argentina en forma invicta en Sendai, sede en la que jugó su último choque el jueves cuando venció 83-79 a Serbia y Montenegro.
Nueva Zelanda se clasificó con dos victorias, la otra fue ante Japón un día antes, luego de tres reveses consecutivos con España, Angola y Alemania.
Panamá, dirigido por el argentino Guillermo Vecchio, perdió ante todos esos equipos.
José de Aragón
Un ejemplo que puede aplicarse
Cuando los dirigentes son responsables y orgullosos de su deporte, actúan de esta manera:
El seleccionador venezolano, Néstor Salazar, se lamentó de papel de su equipo en el Mundial 2006, en el que salió eliminado en la primera ronda, por lo que puso su cargo a disposición de la Federación, según informó la agencia de prensa EFE.
"No sabemos si el cuerpo técnico continuará, ni los jugadores para el próximo año cuando empecemos el preolímpico", declaró el técnico.
"Le dejo a la gente federativa en este caso si uno continúa o no en este trabajo", agregó Salazar que se había puesto como objetivo llevar al equipo hasta octavos de final.
Tras disputar cinco partidos, Venezuela sólo logró ganar uno, ante Nigeria, con derrotas con Francia, Serbia y Montenegro, Líbano y Argentina.
"La afición no puede estar contenta con nuestra actuación. Después del Sudamericano nosotros queríamos quitarnos el golpe en el Mundial, no cumplimos la meta que teníamos trazada y hasta los familiares de uno están molestos, tanto tiempo y no logramos un resultado", declaró el seleccionador.
Tras el Sudamericano que Venezuela había organizado el pasado julio las críticas por haber logrado sólo un cuarto puesto, llevaron a Salazar y al cuerpo técnico a presentar la dimisión en bloque, aunque al final no se llevó a cabo.
"Tenemos que hacer una revisión completa de lo que es nuestra estructura del baloncesto, una revisión bien profunda, para mejorar algunos aspectos del juego", declaró Salazar.
"No estoy decepcionado ni frustrado, sino bastante triste con nuestra actuación", dijo y concluyó su última rueda de prensa en el Sendai City Gymnasium con palabras que muestran que su futuro está en el aire.
"Ya vendrán otras oportunidades, si lo permiten", afirmó en su despedida de Japón.
Nuestros dirigentes del baloncesto serán capaces de hacer esto, pensando en el deporte.
José de Aragón